Sinopsis

Madrid, 2004. La desesperanza trata de apoderarse de un escritor cuando se entera de que su esposa, una soprano que intenta encontrar un lugar en el mundo de la música, es víctima de un atentado terrorista en la estación de Atocha cuando se dirigía a una audición en el Teatro Real.

Marcos se embarcará en un viaje hacia la incertidumbre y hacia sus miedos más profundos con el propósito de encontrar respuestas. Solo conseguirá remontar el golpe emocional que sufre gracias a María, una anciana que conocerá en el peor momento de su vida.

Reseña

Donde el recuerdo nos lleve, una historia que revive uno de los acontecimientos más terribles de la historia reciente de España.

Marcos y Lucía viven en pareja desde hace tiempo; él es escritor y ella cantante de ópera. Ambos buscan tener éxito en sus respectivos oficios y su suerte está a punto de cambiar. Pero, el 11 de marzo de 2004, la desgracia los golpea llevándose la vida de Lucía en los atentados de Atocha. Aquí comenzará una etapa de dolor, tristeza y desesperación que obligarán a Marcos a tomar ciertas decisiones, conocer gente que ha pasado por su misma situación e intentar aprender a pasar página y seguir adelante.

Los narradores se presentan focalizados en los protagonistas y así queda reflejado al inicio de cada capítulo. Viviremos el drama de los que aún siguen vivos y viajaremos al pasado para conocer a los que ya no están y poder entender mejor las relaciones entre los personajes, sus problemas previos al accidente e, incluso, se nos revelarán historias independientes que nos ayudarán a formarnos una opinión más clara acerca de algunos de ellos.

La autora trata de remarcarnos lo trágico de la situación aunque, en mi opinión, fuerza un poco los pensamientos y sentimientos de los protagonistas alcanzando un grado algo poético que quizás sea demasiado para este tipo de novela. El excesivo intento por describir cada ápice de desolación en el ambiente demuestra que, en este caso, habría funcionado mejor la teoría del «mostrar»; esto cargaría menos el texto de emociones que se repiten bastante a lo largo de la trama.

El vocabulario es apto para cualquier lector, sin descripciones que puedan dañar la sensibilidad y con escenas cortas que permiten seguir la historia sin llegar a perderse.

La obra es una buena manera de recordar aquella época y lo que desestabilizó a aquella España de principios de siglo. Tanto para las nuevas generaciones o los que lo vivimos siendo adolescentes, como para aquellos que los sufrieron in situ, esta novela nos ayuda a trasladarnos a ese momento y recuperar de la memoria, al igual que lo hacen otras sobre las guerras mundiales, para no olvidar a los que ya no están y para seguir adelante.